Un nuevo ciclo de liderazgo europeo
Ursula von der Leyen ha asegurado su segundo mandato como presidenta de la Comisión Europea, presentando sus prioridades para los próximos cinco años, incluido el futuro del Pacto Verde. En una votación decisiva, logró obtener 401 votos a su favor, lo que le permitirá liderar la Comisión Europea hasta las elecciones europeas de 2029.
Prioridades y desafíos clave
A pesar del giro a la derecha en el Parlamento Europeo y cierta resistencia a la ambiciosa agenda climática de la UE, von der Leyen ha centrado sus directrices políticas en el centro pro-europeo, señalando su deseo de continuar con la acción climática, enmarcada en el contexto de la competitividad como primera prioridad para los próximos cinco años.
La presidenta advierte que el mundo está en una ‘carrera contra el tiempo’ para abordar desafíos globales como el cambio climático y aprovechar las oportunidades de la IA. Europa mantendrá su búsqueda de cooperación y está ‘abierta a los negocios’ para aquellos que deseen mejorar la tecnología limpia y ampliar la infraestructura digital.
Visión de futuro y compromisos
Las Directrices Políticas de von der Leyen para 2024-2029 confirman que la acción sobre clima y energía sigue siendo una prioridad para la UE y estará intrínsecamente vinculada con la nueva agenda de competitividad. Su visión se centra en implementar el Pacto Verde Europeo, reconociendo la necesidad de acciones audaces y ambiciosas, incluyendo un Plan de Prosperidad Europeo con un nuevo Acuerdo Industrial Limpio.
Un desarrollo muy positivo en las directrices es el compromiso con la adaptación y la resiliencia, que sitúa a la UE a la vanguardia con compromisos para aumentar la resiliencia climática de Europa y la preparación como parte de un plan europeo de adaptación climática, que apoyará a los estados miembros en la planificación, preparación y garantía de evaluaciones regulares de riesgos basadas en la ciencia.
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